Tocando rock

"Como Vos Quisieras", una banda de música rock y ese juicio claro: Él actúa en la realidad y se muestra en los rostros de los amigos

A mediados de 2011 formamos una banda de rock y la llamamos “Como Vos Quieras”. Siempre tuve la necesidad de expresar lo que siento y por ende siempre escribía cosas muy personales y las convertía en música. Mi mayor deseo era que lo que vivo se quede plasmado y reflejado para todos, cosa que con el tiempo da sus frutos. Después de altibajos varios, en verano de 2012, fui a las vacaciones del CLU aquí en Paraguay, con los amigos argentinos. Ahí empezó una gran amistad con un chico de Santa Fe que estudia en Córdoba. Casualmente en esas vacaciones él se encargaba del sonido y yo también. Conversamos mucho sobre todo lo que implique trabajar en sonido, ya que la carrera que estoy cursando es Tecnología en Sonido. En una de las noches él me pidió que le cantáramos una de mis canciones, Murguita de la vida.

¿Que nos pasa hoy?
Los pensamientos profundos están inactivos
No quiero ser un robot arrastrado por los mambos
Y sin vida
Debería de exprimir, el jugo de las cosas
El jugo de la vida, donde mi ser me pide a gritos todo
Pide todo, hasta el cielo.
La oscuridad y el caiguetismo
No me llena, no me siento yo
Quiero alcanzar hasta el sol
Hasta la luna y sentir mi cuerpo vibrar
Debería de exprimir, el jugo de las cosas
El jugo de la vida, donde mi ser me pide
A gritos todo
Pide todo, hasta el cielo
Y sentirme yo.


Las siguientes vacaciones del CLU en verano 2014 se celebraron en Córdoba (Argentina). Llegué allí con el deseo de ser yo de nuevo. Y así fue. Me encontré con un montón de sorpresas o mejor dicho regalos. El lugar, el paisaje, la montaña, los amigos, las peñas, los momentos, las preguntas… ¡Todo! Para mí fue como volver a despertar de una gran anestesia. En la última noche, durante la fiesta, Juanpi me dice: «Toquemos Murguita de la vida. Yo me la aprendí en la guitarra y quiero tocarla». Antes de empezar a tocarla, comentó: «Fuimos a Paraguay y Héctor me mostró este tema, que me gustó mucho. Entonces empecé a tocar la guitarra para un día poder tocar con él. Por eso, hoy les agradezco que me dejen tocar».
Ahora veo cómo el Señor, con su creatividad y sabiendo lo que a mí me apasiona, se hacía presente ahí, abrazando toda mi nada y diciéndome: «Acá estoy, mírame en los rostros de tus amigos». Fueron días para reconocer esto y preguntarme el porqué de las cosas, comparando todo con mi corazón. Al finalizar las vacaciones, unos seis paraguayos nos quedamos en la cuidad de Córdoba para pasar unos días con los chicos de ahí. Fueron días de muchos testimonios, encuentros e intercambio de experiencias. Lo más lindo era ver cómo muchos amigos de Argentina se sabían ya varios de nuestros temas y los coreaban. También nos contaban que antes de la Escuela de comunidad ellos cantan Murguita de la vida.

Después de unos días, Juan Carlos y yo zarpamos para Rosario, Santa Fe, Rafaela y Buenos Aires dando mini conciertos de “Como Vos Quieras”. ¿Quién lo hubiera imaginado que esto pasaría con nuestras canciones? Generalmente a mí me cuesta mucho hacer un juicio sobre lo que vivo, pero hay veces que es demasiado evidente cómo Él actúa en la realidad. Por eso, al regresar a Paraguay unos días después me senté a escribir una nueva canción.

Ya sé, yo sé,
me voy, espérame,
¿Qué es? lo que sirve en el fondo
Me pregunto noche tras noche
Reconocer que puedo ser
Segundo a segundo
Un regalo más para otros más

Vivir sentir
Eso es lo que quiero
Errar perdonar amar
Es un ciclo doloroso
Pero retomar es el principio
De la intensidad
Hay cosas que sé
Hay otras que olvido
No quiero olvidar
Quiero recordar
Ya sé, yo sé.
Me voy, espérame
No me dejes no me dejes
Soledad no quiero más.


Héctor Esteche Cabrera, Asunción (Paraguay)